Definitivamente al no ser reelegido como alcalde o presidente regional será muy triste. Muchos seguramente van a tener que llorar. Muchos con la finalidad de tranquilizarse dirán: Es que no tuvimos buenos asesores, tuvimos un mal equipo de trabajo, No usamos bien La publicidad, No visitamos todos lugares, No regalamos como los otros candidatos, nos faltó presupuesto, etc, etc.
Muchos serán las excusas pero sólo hay un motivo.
En motivo valido hoy, y que se ha visto a lo largo de la historia, es que Dios quita reyes o Gobernantes cuando observa que ese rey ha “desechado su palabra” mientras gobernaban.
El claro ejemplo es del Rey Saúl, que había sido puesto por Dios para dirigir a su pueblo pero a quien sin embargo poco le importó lo que decía Dios. No se preocupó en obedecerle. El pensó que sus decisiones son los mejores y nunca le consultó a Dios nada. Nada, excepto sólo cuando quería que Dios le conceda verse bien ante el pueblo. Solo buscaba que Dios le honre delante del pueblo pero él no deseaba honrar a Dios.(1 Samuel: 15)
Es así que Dios le manda a decir a través de un profeta, lo que es un principio que todo gobernante debe saber. El profeta le dice: "Por cuanto has desechado la palabra de Dios, el también te ha desechado para que no seas Rey" 1 Samuel 15:23. Este es el principio fundamental por el cuál Dios quita reyes.
A todos los que tendrán que salir decirles que si bien ya no podrán gobernar un pueblo hasta que Dios les llame nuevamente, pero mientras tanto deben saber que aún tienen un hogar donde gobernar.
Hoy, en algún sentido, el pueblo te ha desechado como su gobernante, pero no permitas que por la falta de gobierno en tu hogar, por la falta de la palabra de Dios en tu hogar, los próximos en desecharte y los que no te honren sean tus hijos.
La meta de todo padre debe ser en primer lugar ser aplaudido por sus hijos antes que los demás.
Porque recibir el aplauso de la gente, debes saber, que es muy fácil: Todo depende del factor económico.