Pensar que el Perú va a cambiar y/o mejorar gracias a un gobernante, es como querer aprobar un examen sin haber estudiado.
El desear tener un Perú Mejor depende de cada peruano, repito de cada PERUANO. De cada peruano que deje de pensar en su beneficio personal y que piense en el beneficio de todos.
Todos podemos y debemos mejorar al Perú. Honrar la tierra donde hemos nacido y pensar en el bienestar común.
La responsabilidad y la obligación no está sólo en los gobernantes.
Criticar, insultar y agredir a un GOBERNANTE es producto de una mente mediocre.
Que una determinada institución pública no tiene BUENA ATENCIÓN no depende del GOBERNANTE.
Cuando el estudiante se comporte como estudiante, cuando el trabajador cumpla con sus obligaciones y cuando el padre de familia asume sus responsabilidades entonces y sólo entonces podremos hacer de un Perú Mejor.
Hoy en día invirtamos y seamos más creativos en hacer lo bueno que en hacer lo malo.
Dicen que soñar no cuesta nada.
Yo sueño con un Perú Mejor, y prefiero morir soñando y no morir pensando que no se puede.
Porque ya lo dijo en famoso escritor:
Uno no envejece cuando los años pasan, sino que uno envejece el día que deje de soñar.