12 ago 2016

#061 Entrenando para nuestro Viaje Celestial



Alyssa Carson, una niña de 15 años (2016) aproximadamente, se viene preparando para ser la primera mujer en ir al planeta rojo, marte.
Desde que tenía tres años su padre le habló del planeta rojo, como funciona los sistemas de planetas y estrellas que se ven desde la tierra y cómo su país había enviado personas a la luna.
Desde aquella conversación Alyssa tenía claro que quería ser una de las personas que van al espacio y ser la primera en llegar a marte.
Desde entonces se dedica en cuerpo y alma  entre cinco y diez horas todos los días de la semana.
De toda la preparación lo más duro son las pruebas físicas y simulaciones de entornos sin gravedad, que se realizan casi siempre en el Centro Marshall de Vuelos Espaciales, en Alabama. Allí es donde los futuros astronautas conocen las molestias de vivir en una nave espacial que atraviesa el espacio exterior. Una dura preparación no apta para cualquiera.
El objetivo de las pruebas físicas es que el astronauta se adapte a la complicada vida en el espacio.
Lo curioso de la preparación es que sólo las personas entre 27 y 37 años pueden hacer el viaje. Es decir que Alyssa deberá seguir preparándose unos 23 años más aproximadamente.

A diferencia de Alyssa, nuestro viaje al cielo puede ser en cualquier momento.
La pregunta es:
¿Qué tan preparados estamos para poder "adaptarnos" al cielo ?

Apocalipsis 22: 14 y 15 dice:
Bienaventurados los que lavan su ropa...para entrar por las puertas en la ciudad.
Mas los perros estarán fuera, y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras, y todo aquel que ama y hace la mentira.

Como cristianos desde que recibimos a Jesús como nuestro salvador personal ya seremos salvos y llegaremos al cielo. (Si quieres entender este párrafo debes leer: Plan de Salvación)
Pero también es necesario que debemos pensar que aquí en la tierra también debemos tener unas pruebas físicas y simulaciones de lo que será nuestra vida en el cielo.
Aquí algunas simulaciones que deberíamos tener en cuenta:
1.- En el cielo vamos a escuchar a Dios.
¿Cuánto amamos oír y leer la (Biblia)  palabra de Dios .?
2.- En el cielo vamos a hablar con Dios.
¿Cuánto tiempo de nuestra vida pasamos orando de manera personal y en grupo?
3.- En el cielo vamos a vivir en familia.
¿Tenemos el deseo de tener compañerismo con otros cristianos?

Qué "derecho" tendríamos de estar en el cielo y decirle a nuestro Dios:
Padre cuanto he deseado oírte y hablar contigo si aquí en la tierra no nos entrenamos para el cielo.

Hay que ser conscientes que Oír a Dios,  hablar con Dios y estar con otros hijos de Dios es lo que será nuestra vida eternamente y para siempre y que sólo esta vida terrenal se trata de un entrenamiento de ello.

Concentren su atención en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
Colosenses 3:2

El Señor mismo descenderá del cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con trompeta de Dios, y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego los que estemos vivos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados junto con ellos en las nubes para encontrarnos con el Señor en el aire. Y ASÍ ESTAREMOS CON EL SEÑOR PARA SIEMPRE.
1 Tesalonicenses 4:16-17

No dejemos de entrenar porque nuestro viaje al cielo puede ser en cualquier momento.

Te invito a que leas: